El estrés materno prenatal percibido durante el embarazo se ha asociado con resultados adversos en la descendencia a corto y a largo plazo.
Del mismo modo, el estrés prenatal experimentado durante la pandemia por COVID-19 se correlaciona con el neurodesarrollo de la hija o hijo, pudiendo llegar a producir un impacto transgeneracional con posibles repercusiones en la edad adulta.
Un modelo predictivo (algoritmo) basado en la detección de biomarcadores del desarrollo neuronal en la niña o niño, en la sangre de cordón umbilical al momento del parto, será generado para detectar tempranamente retrasos en su desarrollo neurológico.
Una detección temprana del estrés percibido por la o el recién nacido proporcionará una oportunidad para la prevención/terapia personalizada adecuada y oportunas intervenciones. De este modo, se podrían prevenir devastadoras repercusiones en las generaciones post COVID-19.
Investigadores a cargo:
Luis Federico Batiz, Sebastián Illanes, Lara J. Monteiro, Marcela Tenorio, María de los Angeles Avaria, Gino Nardocci, María Isabel Nuñez y Reyna Peñailillo.